Arildo de Barros

Estrenó en 1966 en la obra “Agamêmnon”, de Ésquilo, dirigido por Ítalo Mudado. A partir de 1968, actuó en “Numância”, de Miguel de Cervantes, con dirección de Amir Haddad, “Procura-se Uma Rosa”, dirigido por Carlos Alberto Ratton, y “Futebol, Alegria do Povo”, metáfora de la dictadura militar, “Frei Caneca”, “O Interrogatório” y “Os Pequenos Burgueses”, puestos en escena por Jota D’Ângelo.

Con Ratton actuó también en “Dorotéia Vai à Guerra” y “Depois do Corpo”, en 1970. También trabajo en “As Visitas”, de José Antônio de Souza y “Fala Baixo Senão Eu Grito”, dirigido por Eid Ribeiro. En 1982 hizo “O Encontro Marcado”, dirigido por Paulo César Bicalho, con quien también actuó en “Tute Cabrero”, en 1987. 

Entre 1985 y 1994 fue profesor de Teatro del Departamento de Comunicación de la Pontificia Universidad Católica de Minas Gerais, y puso en escena, como director o como supervisor de dirección, cerca de cuarenta textos nacionales y extranjeros. 

En 1992 llego al Galpão para hacer la asistencia de Gabriel Villela en “Romeu e Julieta”. En 1994, actuó en “A Rua da Amargura” y, desde entonces, integra el elenco de las obras realizadas por el Galpão hasta 2013.

En 1973 fue premiado como Mejor Actor del Año, por “Fala Baixo Senão Eu Grito” y en 2005 recibió el Premio SINPARC de Mejor Actor de Reparto, por “Um Homem é Um Homem”, del Grupo Galpão. En 2007 fue nominado al Premio SINPARC de Mejor Actor, por “Pequenos Milagres”, del Grupo Galpão.